La fe de Jesús – Grupo 3 – Lección 01 “La Santa Biblia”

Cuenta una vieja leyenda romana joven llamado Fortunato, quien poseía bolsa mágica que contenía una sola moneda de oro, la cual se renovaba milagrosamente cada vez que la sacaba y gastaba, por moneda tenía la rara virtud de volver siempre a la bolsa. La Santa Biblia es similar, pues al abrir sus páginas nos enriquecemos con su enseñanzas. Luego la cerramos, y  cuando volvemos a abrirla encentramos las mismas riquezas. La Biblia siempre tiene tesoros incalculables de consejos y orientación.

Un misionero preguntó a una señora si tenía Biblia. Ella se enojó por la pregunta y contestó: “¿Cree Ud. que soy pagana?; en seguida llamó a una niña, a quien ordenó: “Corre, saca la Biblia del cajón para mostrarla al señor”. Al poco rato la niña trajo la  Biblia cubierta de polvo y telaraña; la señora la abrió y exclamó: “¡Qué suerte! ¡Hacía tres años que había perdido mis anteojos y ahora los encuentro dentro Biblia!” Los cristianos no sólo deber la Biblia, sino también leerla todos los días.