07 DE MAYO
UN ESPÍRITU DIFERENTE «

«Solamente mi siervo Caleb ha tenido un espíritu diferente y me ha obedecido fielmente. Por eso a él sí lo dejaré entrar en el país que fue a explorar, y sus descendientes se establecerán allí» (Números 14: 24).

La crítica y el temor son contagiosos. La mayoría de las personas creyó todas las grandezas de Canaán, pero también creyeron que no podían conquistarla. Incluso, llegaron al extremo de tratar de apedrear a Josué y a Caleb. Gracias a la manifestación de la gloria de Dios libraron sus vidas. Mientras tanto, Moisés intercedió en oración por su pueblo. Dios aceptó la oración intercesora, pero le dijo cuáles serían las consecuencias: primero, iban a caminar por el desierto cuarenta años. Entre tanto, todos los que tuvieran más de veinte años iban a morir. Finalmente, los diez espías incrédulos murieron ese mismo día.
Por otra parte, a Caleb y a Josué (vers. 30) se les garantizó ser los únicos de esa generación que entrarían a la Tierra Prometida. La razón primordial es que ellos fueron impulsados por otro espíritu. Tuvieron una actitud que transmitía su confianza en Dios. La diferencia abismal entre lo que ocurrió con los diez espías en comparación con lo que pasó con los otros dos es que Dios tiene en alta consideración la influencia que ejercemos entre los demás. Podemos edificar a quienes nos rodean o transmitir nuestra desconfianza y temores.
Cuando los diez espías coincidieron que todo el pueblo era como langostas, querían decir que los gigantes se iban a deshacer de ellos tan fácil como pisarlos. Pero Dios tiene mejores planes para nosotros, él quiere que seamos nosotros mismos quienes pisemos los obstáculos, nuestras debilidades y tentaciones. En su Nombre podemos ser triunfadores. En última instancia, el enemigo de Dios es quien está detrás de todo lo negativo, erróneo y engañoso. Cuando Dios le dio a Adán y a Eva la promesa del Mesías, les anticipó que Jesús iba a aplastar a la cabeza de la serpiente. En efecto, eso ocurrió cuando Jesús murió en la cruz y al tercer día resucitó. En ese momento quedó totalmente derrotado. Ahora, Dios establece que mediante nosotros, con nuestra fidelidad y dependiendo siempre de él, Jesucristo puede seguir aplastando al enemigo en la cabeza. Así lo entendió el apóstol Pablo: «Así el Dios de paz aplastará pronto a Satanás bajo los pies de ustedes» (Romanos 16: 20).
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SIGUIENDO LAS HUELLAS
Devoción Matutina Para Menores 2023
Narrado por: Linda Rumrrill
Desde: Gran Canaria, España
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