11 DE FEBRERO
«BENDITO DEL SEÑOR»

Hemos visto que el Señor está contigo, y hemos pensado proponerte que hagamos un pacto […] pues nosotros no te hemos molestado […] y ahora el Señor te está bendiciendo» (Génesis 26: 28-29).

Dios siempre nos da nuevas oportunidades. No importa si ayer nos equivocamos, Dios nos perdona y olvida nuestros errores. Hoy es un nuevo día, una nueva oportunidad. Ayer Abimelec evidenció a Isaac, pero hoy lo reconoció como una persona bendita. Es fabuloso que todo lo que Isaac emprendía prosperaba: cosechas, ganado y agua en abundancia. De tal manera que llegó a ser un hombre poderoso en la región. La Biblia aclara que su éxito no era casual, era resultado directo de la bendición del Señor.
A raíz de que te vaya bien por la bendición de Dios, dos reacciones puedes esperar: algunos compañeros te tendrán envidia y otros querrán juntarse contigo. Las dos reacciones las vivió Isaac. Primero, dice la Biblia que los filisteos le tenían envidia (vers. 14). Tanto así que Abimelec le pidió que se Vera de la región. Efectivamente, Isaac se apartó de ese lugar, eso no fue muy amable para con él, él no había hecho nada equivocado. Solamente le pidieron que se fuera porque le iba muy bien. Una de las razones primordiales del porqué no quería a Isaac ahí es porque encontraba agua donde quiera que cavaba.
Lo más importante: en cualquier lugar donde estuviera Isaac, la bendición de Dios lo acompañaba. Ahora, Isaac se estableció en el valle y donde quiera que cavaba, encontraba agua. Nuevamente, surgieron los conflictos entre los pastores de Isaac y los pastores de Gerar. Isaac era pacífico, decidió apartarse a buscar agua en otro lugar y la volvió a encontrar. Tanto fue el éxito de Isaac que las mismas personas que le pidieron que se fuera, ahora lo buscaron para establecer un pacto con él. Querían juntarse con él, ser sus amigos, porque descubrieron que Dios estaba de su lado y siempre le iba bien. Isaac aceptó el trato, a pesar de que sí lo habían molestado y no habían sido amables con él.
Jesús es el agua viva, pero para encontrarlo debes «cavar» en la Biblia con oración y tenacidad; entonces de seguro lo vas a encontrar. Esfuérzate todos los días como Isaac y sus siervos se esforzaban para encontrar el agua literal. ¿Te gustaría ser un bendito del Señor? ¿Te agradaría que tus compañeros quieran estar cerca de ti? Todo esto puede suceder cuando vives cerca de Dios; proyectarás paz, alegría y te irá bien en todo, de tal manera que muchos verán que eres muy especial: un bendito de Dios.
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SIGUIENDO LAS HUELLAS
Devoción Matutina Para Menores 2023
Narrado por: Linda Rumrrill
Desde: Gran Canaria, España
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