DOMINGO 15 DE OCTUBRE
SALIR DE NUESTRA ZONA DE CONFORT
Los moradores de la llanura de Sinar establecieron su reino para su exaltación propia, no para la gloria de Dios. Si hubieran tenido éxito, hubiera nacido un imperio poderoso, que, proscribiendo la justicia, inauguraría una nueva religión. El mundo se hubiera desmoralizado… Pero Dios nunca deja al mundo sin testigos suyos. En esa época había hombres que se humillaban ante Dios y oraban a él. “Oh, Señor”, rogaban, “interponte entre tu causa y los planes y métodos del hombre”…
De repente, la obra que había estado avanzando tan prósperamente fue interrumpida. Fueron enviados ángeles para anular los propósitos de los edificadores… Esto produjo confusión y consternación. Toda la obra se detuvo…
“Así los esparció Jehová desde allí sobre la faz de toda la tierra”. Esta dispersión obligó a los hombres a poblar la tierra, y el propósito de Dios se alcanzó por el medio empleado por ellos para evitarlo.
En nuestros días el Señor desea que su pueblo sea dispersado por toda la tierra. No deben colonizar. Jesús dijo: “Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura”. Marcos 16:15 (Conflicto y valor, p. 43).
El mundo caído es el campo de batalla del mayor conflicto que el universo celestial y los poderes de la tierra hayan presenciado jamás. Fue señalado como el escenario en el cual se libraría la mayor lucha entre el bien y el mal, entre el cielo y el infierno. Todo ser humano desempeña una parte en este conflicto. Nadie puede permanecer en terreno neutral. Los hombres pueden aceptar o rechazar al Redentor del mundo. Todos son testigos, en favor o en contra de Cristo. Cristo llama a los que se alistan bajo su estandarte para que entren con él en el conflicto como fieles soldados, para que puedan heredar la corona de la vida. Han sido adoptados como hijos e hijas de Dios. Cristo les ha dejado su promesa segura de que habrá un gran galardón en el reino de los cielos para que participen en su humillación y sufrimientos por causa de la verdad (Hijos e hijas de Dios, p. 244).
El fiel embajador de Cristo no se avergüenza de la bandera de la cruz. No deja de proclamar la verdad por impopular que sea. En todo lugar, a tiempo y fuera de tiempo, proclama las buenas nuevas de la salvación. Los misioneros de Dios son llamados a enfrentar peligros, a soportar privaciones y a sufrir vituperio por causa de la verdad. Pero en medio de los peligros, de las privaciones y del vituperio, aún deben mantener en alto la bandera…
Estos testigos de los últimos días son osados soldados de Jesucristo. Han gustado los poderes del mundo por venir. Sus pies no están en arenas movedizas sino sobre la roca sólida. No son alejados fácilmente de la fe una vez dada a los santos. Serán fortalecidos por su Dirigente para enfrentar las dificultades. Son mensajeros de justicia, representantes de Cristo que revelan los triunfos de la gracia (Reflejemos a Jesús, p. 339).
===================
NOTAS DE ELENA
LECCIÓN DE ESCUELA SABÁTICA
IV TRIMESTRE DEL 2023
Narrado por: Patty Cuyan
Desde: California, USA
===================
|| www.drministries.org ||
===================
Leave A Comment